Generalmente, todos estos consejos e indicaciones te los proporcionarán en el hospital antes de tu salida, pero siempre es útil contar con algo a mano en caso de que se nos olvide algo o nos sintamos demasiado confusos para retener toda la información.
Esta guía te ofrece información importante sobre cómo cuidar a tu recién nacido durante los primeros días en casa.
I. Preparativos antes del alta hospitalaria
Antes de llevar al bebé a casa, asegúrate de tenerlo todo listo. Esto incluye pañales, ropa cómoda para el bebé, artículos de cuidado personal como loción suave, termómetro, aspirador nasal, toallitas húmedas para bebés y otros elementos esenciales. Prepara un área segura para que duerma el bebé, como una cuna o moisés.
II. Alimentación del recién nacido y cuidado del pezón
La alimentación es clave para el crecimiento y desarrollo del bebé. Si decides amamantar, asegúrate de que el bebé se enganche correctamente al pecho para evitar lesiones en el pezón. Alterna las posiciones de lactancia para evitar la presión constante en los mismos puntos de los pezones. Después de cada toma, deja que tus pezones se sequen al aire para evitar la humedad excesiva, que puede favorecer la aparición de grietas. Si experimentas sensibilidad o irritación en los pezones, considera usar protectores mamarios de silicona durante la lactancia para proteger la piel o el uso de un bálsamo para grietas de lactancia.
Si experimentas dolor persistente, grietas o enrojecimiento, consulta con un especialista en lactancia o un médico para recibir orientación y tratamiento adecuado.
Si optas por la lactancia con biberón, ten a mano biberones esterilizados y leche maternizada de calidad. Establece una rutina de alimentación y observa las señales de hambre y saciedad del bebé.
III. El eructo y los masajes abdominales
El eructo después de cada toma es fundamental para el confort digestivo del bebé y debe ser alentado de manera suave y respetuosa después de cada alimentación. Para provocar el eructo después de amamantar, puedes intentar lo siguiente:
- Posición Vertical: Sostén al bebé en posición vertical y apóyalo contra tu hombro o en una posición sentada, con la cabeza ligeramente elevada.
- Estímulo Suave: Realiza golpecitos suaves en la espalda del bebé con la palma de tu mano. Los golpecitos deben ser suaves pero firmes para ayudar a liberar el gas atrapado.
- Espera Pacientemente: Permite que el bebé eructe a su propio ritmo. Algunos bebés eructan fácilmente, mientras que otros pueden necesitar más tiempo y estímulo.
Para finalizar, considera realizar masajes intestinales después de cada toma. Los masajes suaves en el abdomen del bebé pueden estimular el movimiento intestinal (peristaltismo), lo que facilita el paso de los alimentos digeridos a través del sistema digestivo y reduce la acumulación de gases que pueden causar cólicos. Además, los masajes ofrecen una interacción física positiva entre el cuidador y el bebé, lo que puede calmar al bebé y reducir su malestar asociado con los cólicos.
IV. Cuidado del cordón umbilical
El cordón umbilical necesita cuidados especiales hasta que se caiga por sí solo. Límpialo con alcohol según las indicaciones del médico y mantén el área seca y limpia. Presta atención a cualquier signo de infección, como enrojecimiento o secreción, y consulta al pediatra si tienes dudas.
V. Higiene y cambio de pañales
Cambia los pañales regularmente para mantener al bebé seco y cómodo. Limpia suavemente el área del pañal con agua tibia y una toallita suave o algodón. Utiliza cremas protectoras para prevenir la irritación de la piel.
VI. Sueño del recién nacido
Los recién nacidos duermen muchas horas, pero sus patrones de sueño pueden ser irregulares. Crea un ambiente tranquilo y seguro para dormir, con una temperatura confortable y sin objetos sueltos en la cuna. Prueba el colecho seguro si es adecuado para tu familia.
VII. Signos de alerta y cuándo consultar al médico
Estate atento a los signos de alerta, como fiebre, dificultad para respirar, llanto inconsolable o cambios en la alimentación o el comportamiento del bebé. No dudes en contactar al pediatra si tienes preocupaciones.
VIII. Cuidado emocional y vínculo con el bebé
El apego emocional es esencial para el desarrollo del bebé. Habla con suavidad, acaricia y canta a tu bebé. Responde a sus necesidades con sensibilidad para fortalecer el vínculo afectivo.
IX. Apoyo para los padres y cuidadores
Los primeros días en casa pueden ser abrumadores. Busca apoyo en grupos de padres, familiares y amigos. Aprovecha recursos como grupos de lactancia y servicios de asesoramiento para padres en la comunidad.
Conclusiones
Los cuidados del recién nacido requieren paciencia y amor. Con orientación adecuada y apoyo mutuo, los padres y cuidadores pueden sentirse más seguros y disfrutar de esta etapa especial en la vida de su bebé.
Estamos aquí para apoyarte en esta maravillosa aventura de cuidar a tu recién nacido. Si tienes preguntas o necesitas ayuda, no dudes en contactarnos. Tu farmacia de Andorra está comprometida en ofrecerte el mejor cuidado para tu bebé y tu familia.
¡Felicidades por la llegada de tu